Grupo Legislativo
Partido Movimiento Ciudadano

Autor: Grupo Legislativo PMC

DIPUTADA IVONNE LILIANA ÁLVAREZ GARCÍA

PRESIDENTA DE LA MESA DIRECTIVA DEL

H. CONGRESO DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN

PRESENTE. -

Las mujeres hemos vivido una desigualdad histórica que ha dificultado nuestro acceso a posiciones de liderazgo, tanto en el sector público como en el privado. El Foro Económico Mundial ha estimado que la brecha global de género tomará al menos 99.5 años en cerrarse. Pese a que la igualdad entre hombres y mujeres se ha consolidado como un principio constitucional de nuestro marco jurídico nacional, dicha igualdad dista de verse reflejada en los espacios de toma de decisiones en Nuevo León. Por otro lado, el aumento de la participación política de las mujeres ha estado acompañado por un incremento de la violencia en su contra, dificultando el ejercicio de su función pública.

La lucha por nuestra participación política no ha sido un camino sencillo y ha tomado décadas de trabajo que nuestro marco jurídico refleje esas conquistas.

Si bien jurídicamente hemos tenido la posibilidad de participar en la esfera política de nuestro país desde 1953, en la realidad los espacios públicos han sido en su mayoría dominados por hombres.

Es así, que como consecuencia de la insistencia y el trabajo de mujeres valientes de todo el país, los Congresos han trabajado por crear marcos legales que incentiven y garanticen la participación de las mujeres en la toma de decisiones, así como en los espacios de trabajo.

El 6 de junio del 2019 se aprobó la reforma que modificaba 10 artículos de nuestra Carga Magna para garantizar que la mitad de los cargos de elección en los poderes de la unión sean ocupados por mujeres dentro de los tres niveles de gobierno, garantizando de forma paritaria la participación política entre hombres y mujeres.

Sin embargo, fue hasta el 30 de junio de 2020, más de un año después de la publicación de la reforma nacional, que el Congreso de Nuevo León aprobó en primera vuelta las reformas constitucionales necesarias para la armonización con la constitución federal, reforma que durante más de un año no ha sido estudiada en una segunda vuelta para convertirse finalmente en ley.

Muy a pesar de los avances que se han logrado en materia de paridad total en nuestra legislación, aún queda mucho por hacer para que las mujeres sean debidamente integradas en la toma de decisiones de nuestro gobierno y en las actividades políticas y cívicas. Y si bien se han presentado iniciativas de ley para incorporar la paridad total a nuestros poderes públicos, estas no se han concretado y nuestras leyes a nivel local siguen sin garantizar la participación política de las mujeres.

Esta omisión legislativa en Nuevo León arroja consecuencias visibles. Prueba de ello, es la composición de los gabinetes de las actuales administraciones municipales y estatal. La administración de Jaime Rodríguez, solamente cuenta con dos mujeres en sus Secretarías, como si en Nuevo León no existiéramos mujeres talentosas y capaces de ocupar posiciones de liderazgo de primer nivel, cuando la realidad es que nuestro Estado está repleto de talento.

Los gabinetes de los gobiernos municipales no son la excepción. San Pedro es el único municipio de los 51 que cuenta con un gabinete paritario, cuando cientos de mujeres han hecho carrera pública en sus municipios y se les sigue negando un espacio de primer nivel.

Aunque Nuevo León, con un Congreso Paritario, no tenga una reforma constitucional local, la reforma nacional en materia de paridad de género es clara en su Artículo 41, los gabinetes de los poderes ejecutivos deben ser paritarios. Y repito, "poder ejecutivo", sin distinción entre si este poder se encuentra a nivel estatal o municipal. Que Nuevo León no tenga una reforma de paridad de género no exime al Gobierno del Estado y a los Ayuntamientos a cumplir con los principios Constitucionales, y fuera del deber legal, existe un deber de justicia con las mujeres, para pasar de los bellos discursos que proclaman la protección y defensa de nuestros derechos, hacia una garantía de que estos se cumplan. Sólo tomando en cuenta la participación de todas las voces de nuestra sociedad, es que podemos tener una verdadera democracia, que no excluya a la mitad de su población de las decisiones más importantes.

Este tema es tan importante para el desarrollo de la sociedad que las Naciones Unidas han realizado esfuerzos destinados a la participación paritaria en los gobiernos e incluso la Unión Interparlamentaria en su declaración de 1992 ya nos menciona que: "El concepto de democracia sólo tendrá un significado verdadero y dinámico cuando las políticas y la legislación nacional sean decididas conjuntamente por hombres y mujeres y presten una atención equitativa a los intereses y las aptitudes de las dos mitades de la población."

Es así, que ante la eminente entrada de un nuevo Gobierno Estatal y 51 gobiernos municipales en las próximas semanas, hago uso de esta Tribuna para recordar que la composición de sus gabinetes debe ser paritaria. No hay excusas de que falta talento, capacidad o perfiles idóneos; no es excusa que este Congreso ha sido omiso en aprobar la reforma de paridad de género; no hay excusas de que no es un deber constitucional.

En el pasado ya se han hecho juicios para la garantía de este principio, por lo que los gabinetes no están exentos de este control constitucional.

Todos los partidos políticos en el pasado proceso electoral tomaron como eje central de sus discursos la protección y defensa de la mujer: defendernos es permitir que estemos en esos espacios donde se toman las decisiones más importantes de nuestra entidad y nuestros municipios; protegernos es asegurar el debido ejercicio de nuestros derechos.

Pasemos de los discursos a una realidad donde sí estemos las mujeres. Este Congreso ya es paritario, nos falta el resto de nuestros poderes. Invito a que nuestros nuevos gobiernos hagan lo propio.

En la Ciudad de Monterrey, Nuevo León a 15 de septiembre de 2021

C. DIP. IRAÍS REYES VIRGINIA DE LA TORRE

INTEGRANTE DE LA LXXVI LEGISLATURA

H. CONGRESO DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN