Grupo Legislativo
Partido Acción Nacional

Autor: Grupo Legislativo PAN

Por: Eduardo Leal Buenfil.

Hay diversas razones que explican por qué los jóvenes tienen dificultades para encontrar empleo e insertarse exitosamente en el mercado laboral entre algunas de ellas predominan: una preparación insuficiente, la falta de experiencia y el desconocimiento de las oportunidades que entrega el mercado, entre otros.

Este fenómeno se observa en todas las economías del mundo; los problemas de inserción laboral de jóvenes han existido a lo largo de los años y es un problema que debemos de erradicar en el estado de Nuevo León, pues si bien estas generaciones de jóvenes son de gran importancia para la economía de nuestro Estado.

Es de conocimiento público que los jóvenes frecuentemente se encuentran con una serie de dificultades para terminar sus estudios universitarios, técnicos e incluso algunos no logran ni el nivel medio superior debido a que deben de trabajar para poder apoyar en los gastos familiares, pues las oportunidades de la educación no son las mismas para todos.

Así mismo al terminar o abandonar sus estudios, se enfrentan a una dificultad mayor, que es la discriminación a una inserción en la vida laboral, en donde no se cuentan con muchas oportunidades de empleo, los sueldos son bajos, y aunado a esto en la mayoría de las ocasiones, en las logran emplearse, se les asigna un salario bajo o desigual, a estos empleos, lo anterior bajo la premisa que no cuenta con experiencia laboral suficiente, creando una brecha salarial entre quienes ya cuentan con una experiencia en el mismo trabajo y las tareas que van a desempeñar.

Lo anterior nos permite reflexionar que desde un inicio el joven ya está siendo vulnerado, violando su derecho al trabajo con un salario digno y justo, así mismo se hace una discriminación hacia este nuevo trabajador del mundo laboral porque no se crea un piso parejo pues tendrá un salario menor que una persona que realice las mismas tareas que el bajo la excusa de no contar con experiencia laboral, que muchas veces se emplea únicamente para obtener mayores ganancias para el empleador.

La situación expuesta crea una desventaja para el mercado formal, que se forma de empresas e instituciones públicas y privadas que emplean a jóvenes, pues al vivir este tipo de violaciones laborales, se ven en la necesidad de abandonar sus trabajos o incluso ni siquiera a ser contratados, brincando directamente al mundo de la informalidad, al desempleo con ocio, trayendo consigo desinterés de la juventud en los empleos formales, perdiendo miles de talentos y permitiendo fuga de cerebros en nuestro Estado y en todo México.

Según la revista Forbes, el 38% de los jóvenes universitarios que logran insertarse en el mercado laboral en México perciben salarios menores a los $5,600.00 MX (cinco mil seiscientos pesos mensuales), de acuerdo con especialistas en educación. Asimismo, actualmente hay 884,237 personas con un grado superior de estudios en el desempleo y sin una oportunidad inmediata de conseguir un trabajo. Lo anterior se debe a que los egresados carecen de los conocimientos que demanda el mercado laboral, pues los modelos educativos no están alineados con la realidad.

Por otro lado, la Encuesta Nacional de Ocupación, publicada por el diario Punto por Punto, en los recientes años las tasas de ocupación en el segmento joven van en subida, tras la recuperación a la crisis económica que se presentó a causa de la pandemia por el Covid-19, por lo que es necesario crear condiciones en nuestra legislación para aprovechar la importancia del alza de la ocupación por parte de los jóvenes permitiéndoles tener mejores salarios, dignos e igualitarios a la hora de inscribirse al mundo laboral, y no violentar sus derechos de igualdad por carecer de experiencia en los trabajos.