Decía Don Manuel Gómez Morín que la política no es una aventura, sino una ciencia difícil, una moral rígida, una ardua misión.
Nuevo León es un punto de referencia para México, un Estado productivo y emprendedor, de gente trabajadora, un Estado líder en muchas cosas:
Aportamos el 8% del PIB nacional, nuestra economía es tan grande como la del Estado de México, siendo que tenemos tres veces menos población, y tan grande como la suma de los Estados de Quintana Roo, Aguascalientes, Durango, Morelos, Colima, Nayarit, Zacatecas y Baja California Sur juntos.
En plena pandemia, fuimos la entidad con el mejor índice de generación de empleos en todo México. Y No tengo duda, de que también aquí están las mejores universidades, la mejor comida, los mejores equipos de futbol, la mejor industria, los mejores servicios y un sin fin de cosas más.
Pero también, es un Estado de contrastes, porque pese a tener toda esta riqueza, ya no somos el mejor lugar para vivir.
¿Por qué de qué sirve todo eso, habiendo tantas carencias? Si al día de hoy uno de cada cuatro neoleoneses vive en pobreza. ¿De qué sirve que tengamos leyes que protegen a las mujeres si estas no se cumplen, si una estudiante de la UANL no puede subirse al camión por miedo a la acosen o la traten de violar?
¿De qué sirve tener casa, si miles de personas no pueden disfrutarla porque pasan cuatro horas al día arriba del transporte público y no tienen servicios ni espacios de calidad a su alrededor? ¿De qué sirve tener libertades si mucha gente no puede disfrutarlas?¿De qué sirve ser la capital industrial del país, si no tenemos lo más importante: ni aire limpio para respirar, ni agua.
¿Qué le pasó a Nuevo León? Cómo es posible que una comunidad ejemplar como la nuestra, arrastre tantos años de gobiernos que nos han decepcionado. Olas de violencia, deuda pública, escándalos de corrupción, una expansión urbana desordenada, tráfico, contaminación y ahora hasta una crisis hídrica.
Pese a todo esto, quiero decirles que hoy no estamos aquí para lamentarnos, sino para ver hacia adelante.
Los que formamos parte del Congreso del Estado tenemos un reto enorme, fuimos electos hace un año por los ciudadanos para hacer frente a estas crisis, para dignificar la política y algo muy importante, para trabajar en equipo.
Un día Don Eugenio Garza Sada le dijo a su hijo que..."El espíritu de colaboración es lo que da resultado. La simple crítica produce el resultado contrario".
En ese sentido, quiero decirle al Gobernador, que en Acción Nacional encontrará a una oposición responsable en los temas en los que existan diferencias, señalaremos sus errores y eso no tiene por qué molestarle, para eso es la democracia y para eso existen los contrapesos. Pero también quiero decirle, que contará con todo nuestro apoyo en aquellos temas que beneficien a Nuevo León como ya lo hemos demostrado en este primer año.
Pero eso sí Gobernador, le pedimos exija ese mismo respeto a la Federación, que cumpla su promesa de campaña de defender a Nuevo León, que no permita que desde el centro se mal administre la riqueza que generamos y que tanto necesitan hoy nuestras familias.
Gobernador, grítelo fuerte y gritaremos con usted: ¡A Nuevo León se le respeta!
Ofrecemos nuestro respeto a los poderes ejecutivo y judicial y pedimos también a ellos el respeto que esta soberanía se merece... porque debemos ser congruentes, respetar y responder a la voluntad que la gente manifestó en las urnas.
Finalizo retomando la frase del inicio, las y los Diputados de Acción Nacional, no estamos aquí por una aventura, estamos aquí porque la gente nos dio la mayoría en las urnas y tenemos una misión y un enorme compromiso con Nuevo León y trabajaremos con todas las fuerzas políticas para que a nuestro Estado le vaya bien. Para que Nuevo León vuelva a ser el mejor Estado para vivir de todo México y lo haremos convencidos de nuestra esencia y de nuestro papel en la historia.
Ciudadanos de Nuevo León, iniciamos un capítulo más, en una situación compleja, que estoy seguro hará que saquemos lo mejor de nosotros, lo que nos caracteriza a los del norte. Si trabajamos en equipo, nada nos detendrá.
¡Qué viva Nuevo León y que viva México!