Grupo Legislativo
Partido Acción Nacional

Autor: Grupo Legislativo PAN

Por: Myrna Grimaldo Iracheta.

La eficiencia del transporte es un requisito indispensable para garantizar la movilidad a mediano y largo plazo, especialmente en los principales estados de nuestro país, como lo es Nuevo León.

El transporte público es prioritario en el desarrollo de políticas públicas, debido a que los usuarios requieren de un servicio ordenado, seguro, accesible y eficiente, que sea una verdadera opción colectiva para la movilidad urbana.

Sólo de esta manera se podrá garantizar: un equilibrio en la economía de los ciudadanos, la reducción en tiempos de traslado, así como la disminución de un colapso vial por la saturación de las calles con automóviles particulares.

Sin embargo, para todo lo anterior, se requiere de políticas claras, orientadas a elevar en forma permanente la eficiencia del transporte público y privado, por lo que el aumento a la tarifa del metro, como se anunció hace unos días por parte del Titular de la Secretaría de Movilidad y Planeación Urban, Hernán Manuel Villarreal Rodríguez; no es una opción viable.

Tomemos en cuenta que los ciudadanos se encuentran ante una crisis económica, de salud y desempleo, inclusive de riesgo e inseguridad en el transporte público, sin olvidar que como país nos encontramos ante una inflación que asedia a millones de mexicanos y que ha provocado fuertes desequilibrios en los mercados, generando el aumento desatado en los precios de productos de la canasta básica.

Y aunque el Titular de Metrorrey, Abraham Vargas compare el costo de un cigarro con el costo de un boleto del metro, haciendo alusión a los gastos innecesarios de la ciudadanía, al parecer sus estudios académicos tan elevados, no le han permitido desarrollar la sensibilidad que un funcionario público debe de tener para ponerse en los zapatos de los usuarios que día a día padecen diversas situaciones en el transporte público. Pues más allá de visualizar una ciudad europea con alta movilidad, se debe de brindar lo mínimo a través de un servicio de transporte digno.

Si bien se habla que en el mes de septiembre del 2018 el Consejo de Administración de Metrorrey autorizó el alza de un peso a la actual tarifa, de 4.50 pesos, y un desliz mensual que llevaría el cobro a nueve pesos, el Secretario de Movilidad y Planeación Urbana, adelantó que buscarán no topar el cobro en nueve pesos y buscarían que el desliz mensual de 10 centavos, sea frenado hasta que la tarifa llegue a 11.50 pesos, desdiciéndose minutos después para regresar a la primera alternativa; lo que de igual manera sería un gran golpe al bolsillo de los ciudadanos. Pues no hay que olvidar el gran tarifazo que el Consejo de Agua y Drenaje de Monterrey realizó a puerta cerrada y sin consulta alguna a todos los usuarios del servicio de agua y drenaje; dejando claro que el nuevo Nuevo León ya había llegado.

En la Sesión Permanente del Congreso del Estado rechazamos el incremento a las tarifas del Metro y lamentablemente no se hizo caso a las demandas de los ciudadanos que una vez más son los más afectados por estas medidas.