Grupo Legislativo
Partido Acción Nacional

Autor: Grupo Legislativo PAN

Por: Claudia Caballero Chávez.

La educación es un derecho humano reconocido en tratados internacionales y en nuestra Carta Magna.

En lo local, el Estado, de acuerdo a lo establecido en el Artículo 3, de nuestra Constitución Local, debe impartir la educación básica y media superior obligatoria, promover y atender la educación inicial y la educación superior, así como todos los tipos y modalidades educativas necesarias para el desarrollo del individuo, apoyar la investigación científica y tecnológica, y alentar el fortalecimiento y difusión de nuestra cultura.

Derivado de lo anterior, tenemos que existen diferentes tipos y modalidades de educación reconocidos en la Ley de Educación del Estado, uno de ellos es la educación especial, la cual es aquella que está destinada a individuos con necesidades educativas especiales, con discapacidades transitorias o definitivas, así como a aquellos superdotados o con talento extraordinario.

Para cumplir con los fines de la educación especial, la autoridad educativa estatal tiene el deber de ampliar gradualmente este servicio, asignando, a cada escuela donde exista la necesidad, un equipo interdisciplinario, el cual, en nuestro Estado, está representado por las Unidades de Asesoría Psicopedagógica, las UAP, que se encuentran dentro de las dependencias de la Secretaría de Educación del Estado.

Las UAP, son equipos profesionales que tienen el objetivo de brindar servicios de asesoría psicopedagógica con enfoque preventivo y/o remedial a las escuelas, maestros, padres de familia y alumnado de educación básica, que presentan problemas en el aprendizaje, de conducta, emocionales y de comunicación. Actualmente existen 24 centros y una Coordinación, 23 en el Área Metropolitana y una en el municipio de Linares.

Su función social es muy importante, pues no solamente abordan cuestiones de aprendizaje, sino también de alguna situación de riesgo. Quienes son detectados con algún tipo de necesidad especial, reciben atención gratuita y se les otorga un carnet a los padres para que la escuela esté enterada de que los niños asisten a la UAP.

Atender a la población con necesidades de educación especial definitivamente representa un reto y un desafío para el Sistema Educativo, nos ayuda a reducir las barreras ideológicas y físicas que resultan una limitante en el proceso de aprendizaje y la participación plena de los alumnos y alumnas de la educación básica. Se debe asegurar que todos reciban la atención que requieren para su correcto desarrollo.

Sabemos, por acercamientos que hemos tenido con beneficiarios de estas unidades, que es posible ver buenos resultados de sus servicios; sin embargo, a decir de ellos mismos, hace falta que cuenten con mejores instalaciones, con el mantenimiento y/o las ampliaciones adecuadas para su funcionamiento.

Asimismo, que es necesario más personal, tanto de oficina como de mantenimiento y recepción, pues algunas de las unidades no cuentan si quiera con conserjes o secretarias, y estas funciones tienen que ser cubiertas por el personal de especialidad, que mejor resultado daría, si se dedicara solo a la atención de los usuarios.

De igual manera, consideramos que este tipo de asesoría y apoyo, debe ser replicado en otras regiones de nuestro Estado, ya se cuenta con la unidad de Linares, empero, algunas de las unidades del Área Metropolitana de Monterrey atienden población de municipios rurales o periféricos por lo que el que pudiesen existir ya sea más unidades o hacer accesible los servicios a esta población disminuiría la carga de las ya existentes y beneficiaría a más usuarios.

Estamos conscientes de que las Unidades de Asesoría Psicopedagógica ya tienen un camino andado pero existe una demanda creciente de estos servicios entre la población la cual debemos de tomar en cuenta.