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Partido Acción Nacional

Autor: Grupo Legislativo PAN

Por: Patricia Lozano Onofre.

 

La lactancia materna es una de las formas más eficaces de asegurar la salud y la supervivencia de los niños. Combinada con la alimentación complementaria, la lactancia materna óptima previene la malnutrición y puede salvar la vida a cerca de un millón de niños.

Si se empezase a amamantar a cada niño en la primera hora tras su nacimiento, dándole solo leche materna durante los primeros seis meses de vida y siguiendo dándole el pecho hasta los dos años, cada año se salvarían unas 800,000 vidas infantiles.

Durante los últimos decenios se han seguido acumulando pruebas sobre las ventajas sanitarias de la lactancia materna, sobre la que se han elaborado numerosas recomendaciones. La Organización Mundial de la Salud puede afirmar ahora con plena seguridad que la lactancia materna reduce la mortalidad infantil y tiene beneficios sanitarios que llegan hasta la edad adulta.

La leche materna es el primer alimento natural de los niños, proporciona toda la energía y los nutrientes que necesitan durante sus primeros meses de vida y sigue aportándoles al menos la mitad de sus necesidades nutricionales durante la segunda mitad del primer año y hasta un tercio durante el segundo año de vida.

La leche materna promueve el desarrollo sensorial y cognitivo, además de proteger al bebé de enfermedades infecciosas y crónicas. La lactancia natural exclusiva reduce la mortalidad infantil por enfermedades de la infancia, como la diarrea o la neumonía, y favorece un pronto restablecimiento en caso de enfermedad. La lactancia natural contribuye a la salud y el bienestar de la madre, ayuda a espaciar los embarazos, disminuye el riesgo de cáncer ovárico y mamario, incrementa los recursos de la familia y el país, es una forma segura de alimentación y resulta inocua para el medio ambiente.

La lactancia materna es a la vez un acto natural y un comportamiento que se aprende.

Abundantes investigaciones demuestran que las madres u otras cuidadoras necesitan un apoyo activo para instaurar y mantener un amamantamiento adecuado. En 1992, la OMS y el UNICEF pusieron en marcha la Iniciativa «Hospitales amigos del niño» con la idea de favorecer la lactancia natural ayudando a las mujeres a ejercer el tipo de maternidad que lo propicia. Esta iniciativa está contribuyendo a que la lactancia natural exclusiva gane terreno en todo el mundo. Combinada con medidas de apoyo en todos los eslabones del sistema de salud, puede ayudar a las madres a mantener este modo de alimentación.

Durante los últimos decenios se han seguido acumulando pruebas sobre las ventajas sanitarias de la lactancia materna, sobre la que se han elaborado numerosas recomendaciones.

A nivel mundial, menos del 40% de los lactantes menores de seis meses reciben leche materna como alimentación exclusiva. Un asesoramiento y apoyo adecuados en materia de lactancia materna es esencial para que las madres y las familias inicien y mantengan prácticas óptimas de amamantamiento.

La Organización Mundial de la Salud promueve activamente la lactancia natural como la mejor forma de nutrición para los lactantes y niños pequeños. En estas cifras y datos se examinan los muchos beneficios asociados a esa práctica, y se muestra que apoyando enérgicamente a las madres es posible aumentar la lactancia materna en todo el mundo.

De acuerdo con proyecciones de la Organización Mundial de la Salud se estima que a finales del año 2020 los índices de morbilidad en recién nacidos incrementara del 12 al 19.4%, debido a las enfermedades y complicaciones de alimentación asociadas al aumento de partos prematuros, por ello es necesario crear en México más bancos de leche humana como medida preventiva.

Dicha situación será un problema de salud internacional y nacional, y los bancos de leche humana son importantes porque beneficiarían a recién nacidos que no pueden ser amamantados, como prematuros, desnutridos en útero, post operados, quienes pesen menos de 1,500 gramos y a los neonatales con problemas gastrointestinales.

México inició hace un año este proyecto sugerido en 2001 por la Organización Mundial de la Salud y Unicef, y a la fecha sólo existen ocho bancos de leche humana distribuidos en los Estados de Veracruz, Zacatecas, Tabasco, Distrito Federal y el Estado de México, número que contrasta de manera alarmante con los 230 bancos existentes en Brasil.

 Después de conocer las cifras de la OMS, especialistas en la materia se preguntan constantemente ¿cómo alimentar a estos niños que son pacientes prematuros que inician con dificultad respiratoria que les imposibilita la succión, además de que el estrés que sufren las madres hacen que ellas disminuyan su producción de leche?

La finalidad de los bancos de leche es establecer reservas de este alimentos para dar seguridad al derecho que tienen todos los recién nacidos a una alimentación oportuna y gratuita, además de fomentar la lactancia materna y de disminuir el suministro de fórmulas.

En países en desarrollo como México resulta más riesgoso darles fórmulas a los bebés porque existen poblaciones de bajos recursos que no pueden mantener los biberones estériles y eso provoca incremento de infecciones gastrointestinales. Con los bancos de leche humana se evitarías tales riesgos y se estaría garantizando buena alimentación de calidad, toda vez que la leche refuerza el sistema inmunológico y evita la obesidad.

 Por lo anteriormente expuesto, y por considerar que es un tema sumamente noble, con el único objetivo de legislar sobre la creación, activación y funcionamiento de los bancos de leche materna, propusimos una la iniciativa de reforma a la Ley de Salud Estatal para implementar Bancos de Leche Materna, que esperamos a la brevedad sea aprobada, para beneficiar a nuestras futuras generaciones.