Gral. Mariano Escobedo

Nació en San Pablo de los Labradores (hoy Galena, N.L.), el 16 de Enero de 1826.

De joven se dedicó al cultivo del campo y a la arriería.

Durante la invasión americana, se puso a las órdenes del capitán Francisco Martínez Salazar. Participó en diversos combates durante el sitio de la ciudad de Monterrey (21 al 24 de septiembre), en los fuertes de la Purísima, Tenerías y cerro del Obispado, entre otros. También participó en la batalla de la Angostura, con el grado de alférez del estado mayor del general José López Uraga.

Se unió al Ejército del Norte durante la proclamación del Plan de Ayutla en 1855. Combatió a las órdenes de Zuazua y Aramberri. En 1860 se sumó al movimiento de los congresistas, contra Santiago Vidaurri. Combatidos por éste tuvo que dejar el Estado y marchar al interior donde se incorporó a las Fuerzas de Gonzáles Ortega.

Durante la invasión francesa, participó en la batalla de las Cumbres de Acultzingo y en la de Puebla, el 5 de Mayo 1862.

Auxilió a Porfirio Díaz en la reorganización del Ejército de Oriente, operó en Oaxaca, Puebla, Michoacán y Tabasco.

Llamado por Juárez, regresó al Norte. En donde reorganizó el Ejército del Norte.

Por orden presidencial fue nombrado gobernador de Nuevo León. Pero delegó el mando al Lic. Simón de la Garza Melo, para dedicarse exclusivamente a la organización de fuerzas.

El 16 de Junio de 1866, Escobedo venció a los franceses en La Batalla de Santa Gertrudis. Marchó luego a Matamoros, a someter a Canales, rebelado contra el gobierno, y en Monterrey, emprendió la campaña al centro del País.

Concluida la intervención francesa, se hizo cargo de la jefatura de la 3ª. División del Ejército. Fue electo después gobernador de San Luís Potosí (1869-1873). Fue senador en 1873, por Querétaro y San Luís Potosí. En 1881, formó parte de la comisión organizadora de los códigos militares y ocupó, en 1882, la presidencia de la Suprema Corte de Justicia Militar.

Murió en Tacubaya, el 22 de mayo de 1902.

El Gobierno de Francisco I. Madero, por decreto del 18 de diciembre de 1912, dispuso se escribiera su nombre con letras de oro en el salón de Sesiones del Congreso de la Unión y lo declaró Benemérito de la Patria. El Congreso de Nuevo León, por decreto del 24 de Febrero de 1868, le dio el nombre de villa de General Escobedo a la antigua hacienda del Topo de los Ayalas.